El rendimiento juega un papel clave dentro de la industria para lograr resultados positivos. A través de él, se mide el nivel de productividad de las máquinas, es decir, si el tiempo y la cantidad de producción están satisfaciendo la demanda.
Para mantener el buen rendimiento de la maquinaria, es necesario monitorear varios aspectos, como los ajustes relacionados con la velocidad de producción del equipo. Además, el proceso de mantenimiento es indispensable para garantizar que la maquinaria funcione de acuerdo con el tiempo de disponibilidad programado. Esto sucede porque, con el mantenimiento, es posible predecir fallas, realizar cambios programados y evitar tiempos de inactividad.
Según la CNI (Confederación Nacional de la Industria), las inversiones previstas para 2024 por parte de la industria están destinadas a ampliar la capacidad de producción (42%) y mejorar el proceso productivo actual (42%). Además, en 2023, cerca del 74% de estas industrias tuvieron la innovación tecnológica como estrategia de inversión. Esta información fue divulgada en el estudio “Inversiones en la industria“, publicado en 2024.
Un ejemplo de esta innovación tecnológica es la digitalización, que ayuda a la industria a alcanzar un nuevo nivel de productividad. En este caso, se verá cómo una gran multinacional del sector alimentario utilizó la ciencia de datos para mejorar el rendimiento de las líneas de producción. La industria recurrió a la solución ST-One cuando se dio cuenta de que dos líneas aparentemente idénticas funcionaban a diferentes velocidades. Con los datos recopilados, fue posible averiguar por qué sucedía esto y solucionar el problema.
El impacto también es en la rentabilidad, ya que el rendimiento es un factor crítico en los resultados financieros de las industrias. Según el Portal de la Industria, la ganancia es de hasta un 86% en la productividad después de la implementación de tecnologías en la línea de producción.
Descubre más casos como este, en versión ampliada, en la página de casos de éxito.